NOSOTROS LES AYUDAMOS Y
NOS CONFUNDIMOS
Carta de un ser
desconocido a la Tierra.
El sueño era una Tierra en paz
un hogar duradero donde la naturaleza nos acompaña, nos arropa y nos alimenta.
Un animal entre todos estaba destacando, este era un homínido al que se le
veían grandes progresos, por eso decidimos ayudarle.
Le dimos la inteligencia, el
don de la palabra, la inventiva, el amor, la pasión… pero nos confundimos,
cuando intentamos eliminar lo que habíamos creado era demasiado tarde… Le
mandamos ventiscas, vientos huracanados, fuertes diluvios, glaciaciones y hasta
le quemamos parte de la tierra fértil aun siendo perjudicial para el resto de
especies, pero el virus se fue extendiendo por toda el planeta. Ocuparon todos
los lugares, desde los más fértiles a los más secos y helados. Todo lo usaba a
su antojo, hicieron desaparecer especies, desertizaron zonas, usaban todo lo
que les caía en sus manos sin ningún respeto por el resto de seres vivos ni por
su madre Tierra… Poco a poco iban avanzando, iban creando civilizaciones y ahí
es donde mejor vimos su maldad, ya no se respetaban ni a ellos mismos,
esclavizaban, mataban y torturaban por placer a personas de su misma especie,
algunos hasta se los comían, inventaron cultos extraños, que no tenía nada que
ver con lo que les habíamos enseñado… solo lo hacían para mantener sujeto a sus
congéneres, metieron el miedo en el cuerpo, comenzaron las guerras entre
pueblos, solo por obtener más poder como si no pudieran vivir todos juntos,
como si les costara tener vecinos… Se inventaron leyes para el pueblo pero no
para los que gobiernan… y convirtieron la Tierra en su rincón se creyeron que
eran los herederos de algún derecho, ¿pero cuál? Nosotros solo le dimos la vida
e intentamos ayudarlos, pero nos confundimos.
Ya han pasado decenas de miles
de años, para mí eso no es nada, para ellos toda una evolución, hay algunos que
son buenos que quieren cambiar el mundo, quieren respetar a la naturaleza,
quieren la paz y querer a la madre Tierra, cada vez son más pero unos pocos
malvados siguen gobernando, siguen mandando sin ninguna piedad, sus inventos a
lo largo de los siglos les han hecho más evolutivos pero lo que no saben es que
la evolución auténtica no está en los objetos ni en las máquinas, está en el
alma, en su interior. El hombre está comprobado que nunca podrá ser libre
mientras se dejen dirigir por unos cuantos. Creen que son libres pero son
esclavos de su propia evolución, han olvidado todo, no saben ni de dónde vienen
ni hacía donde van. Su afán por
controlarlo todo ha hecho que no controlen nada y que solo se controlen a ellos
mismos y a lo que les rodea.
El odio entre ellos, las
falsas promesas, las falsas creencias, las armas letales que crean harán que se
destruyan. Ya lo han hecho en varias ocasiones desde que le dimos el don, pero
parece que no aprenden, es como si fuera una rueda que siempre gira hacia el
mismo lado, por muchos miles de años que pasen vuelven otra vez a las mismas
estupideces… a las mismas costumbres, a los mismos gestos y a las mismas invenciones,
hay algo que hicimos mal y es dejarlos por imposible, pero ahora volvemos a
preocuparnos por ellos y creemos que tenemos la solución… Pero si ellos no se
dejan aconsejar tendremos que convencerlos con hechos…
El Ángel Desconocido (El terrestre Extraterrestre)